El cambiazo (Catherine)

Estaba aburrida en la habitación, sin nada que hacer y con poca imaginación como para que se me ocurriera algo lo suficiente divertido para hacer. Sin embargo, decidí salir a dar una vuelta por los pasillos, quizás eso me trajera a la mente algo para hacer.
Caminé lentamente hasta llegar frente a la puerta del laboratorio de química. Un pequeña sonrisa de malicia se dibujó en mi rostro ya que una idea un tanto perversa se había cruzado por mi mente. Miré a mi alrededor por si venía alguien y, al no ver a nadie más por allí, entré.
Aquella mañana el profesor me había echado de clase por estar hablando sin prestarle atención y sabía que al día siguiente tenía pensado hacer una práctica en el laboratorio con un ácido bastante diluído para que no hubiera peligro. Sin embargo, casualmente alguien cambiaría ese ácido diluído por uno con una concentración mayor. Si había una asignatura, además de música, que se me diera bien era la química en la práctica.
Sin pensarlo dos veces, cogí una de las batas y me puse manos a la obra esperando que de lo que sirvieran de algo las veces que ponía atención en las clases y no me equivocara al hacer los cálculos para preparar el ácido concentrado. Esto solo sería mi pequeña venganza por haberme expulsado de clase aquella mañana...